Mi verdadero nombre es Matías Stiep. Nací en el año 1981 y actualmente bordeo la treintena.
No tengo seudónimo y soy de Cipolletti, provincia de Río Negro, ciudad en donde vivo actualmente. Soy de virgo.
Creo que el oficio de escritor implica un poquito de cada una de las categorías: juventud para imaginar; "madurez" para reflexionar; espíritu de niño para corretear detrás de las palabras, jugar con ellas; problemático, por el malhumor y la rabia de la escritura difícil, la página blanco y pantanosa, los bloqueos; aplicación, para avanzar a través de los renglones y las páginas y las vidas y los siglos; y soledad, porque éste es el "oficio más solitario del mundo".
En cuestión laboral, trabajo de oficina. En rama artística, literatura. Ambas me gustan, obviamente más la segunda que la primera. La inspiración, para el narrador, es un espejismo. Una leyenda urbana.
La idea del blog lo empecé hace años, 2007 si mal no recuerdo. En el inicio la idea era abrir un canal de difusión para mis escritos, pero terminó derivando en una caja de resonancia para otras voces: últimamente, la poesía que me supo conmover. Ellas me regalan la alegría de compartir esa emoción.
No tengo seudónimo y soy de Cipolletti, provincia de Río Negro, ciudad en donde vivo actualmente. Soy de virgo.
Creo que el oficio de escritor implica un poquito de cada una de las categorías: juventud para imaginar; "madurez" para reflexionar; espíritu de niño para corretear detrás de las palabras, jugar con ellas; problemático, por el malhumor y la rabia de la escritura difícil, la página blanco y pantanosa, los bloqueos; aplicación, para avanzar a través de los renglones y las páginas y las vidas y los siglos; y soledad, porque éste es el "oficio más solitario del mundo".
En cuestión laboral, trabajo de oficina. En rama artística, literatura. Ambas me gustan, obviamente más la segunda que la primera. La inspiración, para el narrador, es un espejismo. Una leyenda urbana.
La idea del blog lo empecé hace años, 2007 si mal no recuerdo. En el inicio la idea era abrir un canal de difusión para mis escritos, pero terminó derivando en una caja de resonancia para otras voces: últimamente, la poesía que me supo conmover. Ellas me regalan la alegría de compartir esa emoción.
Creo que mis sueños son literarios. Este oficio nos signa la forma de mirar, oir, pensar, oler, respirar. Condiciona y revoluciona nuestras vidas. Sueño con el desafío máximo para todo escritor: alcanzar la propia voz, ese tono personalísimo, ese matiz característico e intransferible que es, a su vez, la eclosión total de nuestro yo más visceral, el yo-escritor.
Lo que me gustaría cambiar del mundo es la injusticia. Y lo que dejaría como tal es la generosidad y el amor en todas sus formas, que todavía existen.
Lo que más amo de mí es la sed de las palabras. Y lo que odio es el “demasiado racionalismo”. Tengo unos cuantos defectos, naturalmente. La impuntualidad es el primero que acude a la mente (valga la paradoja). Mi manía son los tachones, por ejemplo. Me veo en el futuro intentando en vano escapar de la literatura.
Siento que son muchos los sentimientos que me describen y en este momento tironean y se empujan en pos de la figuración. Un empate técnico entre todos preservará la armonía entre ellos, ¡supongo!
Lo que quisiera compartir en esta entrevista es que creo fervorosamente que cierta literatura, en particular la poesía (entendida como formas de colocarse y mirar a nuestro alrededor, e interactuar con él), pueden tener un increíble poder sanador. Para nosotros y para los demás.
Lo que descubrí como blogger que me sorprendió es la presencia furtiva del lector, sus ojos en la oscuridad como los del tigre entre los bambúes, la secreta vibración de sus pupilas a través de sus comentarios y palabras.
¡Tengo un montón de blogs para sugerir y compartir! Los que están como sitios amigos en mi blog, y todos los que sigo. Todos me dejaron alguna gema subrepticia. Eso es justamente lo que busco en mis recorridas.
Soy de dejar comentarios. Me gusta corresponder a quienes comentan en el mío. Se va tejiendo así un intercambio nutritivo y muy cálido.
Mis bloggeros favoritos son todos los que sigo. Si hiciera nombres correría el peligro de ser injusto ante cualquier olvido culposo.
Un mensaje que dejaría a todos mis bloggeros sería que “la ortografía es el agua dulce de nuestro mundo. Es nuestro deber cuidarla y protegerla”.
Lo que me gustaría cambiar del mundo es la injusticia. Y lo que dejaría como tal es la generosidad y el amor en todas sus formas, que todavía existen.
Lo que más amo de mí es la sed de las palabras. Y lo que odio es el “demasiado racionalismo”. Tengo unos cuantos defectos, naturalmente. La impuntualidad es el primero que acude a la mente (valga la paradoja). Mi manía son los tachones, por ejemplo. Me veo en el futuro intentando en vano escapar de la literatura.
Siento que son muchos los sentimientos que me describen y en este momento tironean y se empujan en pos de la figuración. Un empate técnico entre todos preservará la armonía entre ellos, ¡supongo!
Lo que quisiera compartir en esta entrevista es que creo fervorosamente que cierta literatura, en particular la poesía (entendida como formas de colocarse y mirar a nuestro alrededor, e interactuar con él), pueden tener un increíble poder sanador. Para nosotros y para los demás.
Lo que descubrí como blogger que me sorprendió es la presencia furtiva del lector, sus ojos en la oscuridad como los del tigre entre los bambúes, la secreta vibración de sus pupilas a través de sus comentarios y palabras.
¡Tengo un montón de blogs para sugerir y compartir! Los que están como sitios amigos en mi blog, y todos los que sigo. Todos me dejaron alguna gema subrepticia. Eso es justamente lo que busco en mis recorridas.
Soy de dejar comentarios. Me gusta corresponder a quienes comentan en el mío. Se va tejiendo así un intercambio nutritivo y muy cálido.
Mis bloggeros favoritos son todos los que sigo. Si hiciera nombres correría el peligro de ser injusto ante cualquier olvido culposo.
Un mensaje que dejaría a todos mis bloggeros sería que “la ortografía es el agua dulce de nuestro mundo. Es nuestro deber cuidarla y protegerla”.
MI BLOG: http://jardindebolsillo.blogspot.com/
Fabuloso Muchita, seguimos descubriendo valores.
ResponderEliminarMuchos besos querida amiga.
Hasta pronto.